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domingo, 30 de mayo de 2010

DESATRE TOTAL


El término adolfada sigue de moda. Trajo don Adolfo Martín 10 toros, 10, para cerrar la feria con broche torista y le rechazaron ocho. Desde hace casi 20 años venía cerrando el tío Victorino. Lo que podía ser oportunidad acabó por actualizar la palabra que un día inventé para designar la tropelías de don Adolfo, un ganadero tan honesto que no da de comer a sus toros. A todo esto los veedores de Taurodelta también se han lucido. Dicen que Adolfo en un gesto de honestidad "se llevó la corrida"; lo que se llevó fue los dos toros aprobados.

Total que sustituyeron la adolfada por una corrida de Marqués de Domecq y la plaza ya estaba de uñas desde que sonaron los clarines. Lo curioso es que la había un llenazo, que cualquiera que sepa cómo sale lo del Marqués era para devolver la entrada.

El cabreo subió de decibelios cuando devolvieron el primero con una presión fortísima contra el palco. El sobrero de Cortijoliva, cinqueño, redondo, gazapón y a la defensiva y sin pasar, como El Fundi. El cuarto es todavía peor, por dentro se mete y caza, y El Fundi abrevia.

El segundo carece de cuello. Imposible que humille, como así es. Y encima en cada muletazo se avisa más. Rafaelillo está digno y valiente, saca más de lo que hay. El quinto es muy lavado, impropio para Madrid, se duerme en el caballo. Rebrincado y con las manos por delante en la muleta. Bruto. Descastado como todos. Sin poder. Desesperante.

El tercero es un inválido que enciende la plaza de nuevo. El presidente lo aguanta contracorriente. Javier Valverde queda inédito y lo mata mal: un sablazo que hace guardia y varios pinchazos antes de descabellar.

El sexto tiene otro aire. Es el último toro de Javier Valverde en Madrid. Se despide a final de temporada. Se mueve mejor el del Marqués aun sin terminar de humillar.Valverde le hace seguir. Pero no dura. Lo alegró por manoletinas y lo mató de un espadazo.
Ficha:

Monumental de las Ventas. Sábado, 29 de mayo de 2010. Última corrida de feria. Lleno. Toros de Marqués de Domecq, desigual de presentación, justa de poder y fuerzas, sin casta y con peligro sordo; el 6º tuvo mejor aire; y un sobrero de Cortijoliva (1º bis), redondo, cinqueño, gazapón y a la defensiva.

El Fundi, de verde esperanza y oro. Media estocada tendida y dos descabellos (pitos). En el cuarto, estocada atravesada (silencio).

Rafaelillo, de grana y oro. Pinchazo, estocada corta atravesada y descabello (silencio). En el quinto, estocada corta atravesada (silencio).

Javier Valverde, de rioja y oro. Estocada baja que hace guardia, dos pinchazos y tres descabellos (silencio). En el sexto, estocada (ovación de despedida).

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