CURRO DÍAZ, PRIMERA OREJA DE SAN ISIDRO

Tibio ambiente para estrenar San Isidro. Tres cuartos de entrada. El primero destaca por su cara, que lleva siempre por las nubes. Carece de poder. Los derribos en el caballo se deben más bien a accidentes ecuestres. Curro Díaz brinda al público y se extiende en larga faena. Cabecea el toro de Salvador Domecq por falta de fuerza.

Tampoco pasa nada con el castaño segundo, al que no se le ve el remate de toro de Madrid por ningún lado. Nula clase. También le cuesta descolgar. Juan Bautista esta frío, pesado y a la pala. Lo mata bien al menos.

El tercero esta gordo como una pelota. 592 kilos apretados. Tiene trote cochinero. Anchura de sienes y cabeza por arriba. Gallo se pone a darle un circular invertido al final de una faena anodina. Se cobra una estocada.

¡Qué bien ha matado Curro Díaz al cuarto! Altón y noblecito el toro, humilla lo justo el tramo justo. Díaz pinta el desmayo bien. Dos series en la linea natural del toro, por decirlo fino. Son el argumento de la faena y sobre todo el espadazo. La oreja genera dudas.

El quinto, abierto de cuerna, desparrama mucho la vista. Y como encima Bautista de coloca para destorear el panorama es completo. Desfondado y desolador.

Gallo, con un sobrero de Navalrosal, más serio que toda la corrida, quiso, pero no terminó de romper ni la faena ni el toro, que apuntó cosas. Arrimón final.

Ficha:
Monumental de las Ventas. Jueves, 6 de mayo de 2010. Primera corrida de Feria. Tres cuartos de entrada. Toros de Salvador Domecq, desiguales de presentación, carentes de remate 1 y 2, sin poder y vacíos de bravura y clase; destacó el 4 dentro de un orden; un serio y cinqueño sobrero de Navalrosal (6 bis), apuntó sin romper. Curro Díaz, de verde botella y oro. Pinchazo, pinchazo hondo y descabello (silencio). En el cuarto, estocada hasta la bola (oreja). Juan Bautista, de azul marino y oro. Estocada (silencio). En el quinto, pinchazo, media estocada y descabello (silencio). Eduardo Gallo, de verde oliva y oro. Estocada (silencio). En el sexto, tres pinchazos y estocada. Aviso (silencio).